Director:
Delmer Davis
Estados
Unidos; año 1957; duración, 92 minutos.
Reparto: Glenn Ford, Van Heflin, Felicia Farr, Leora
Dana, Henry Jones, Richard Jaeckel, Robert Emhardt, George Mitchell.
Sinopsis:
Ben
Wade (Glenn Ford) es el jefe de una banda de temibles forajidos. Después de
atracar una diligencia decide pararse en un pueblo, en el que es apresado para
llevarle ante la justicia.
Dado
que la banda de Wade no va a dejar que lleven a su jefe a prisión, el sheriff
contrata a varios hombres para que le custodien y se pone en marcha un plan
para impedir el rescate.
Dan
Evans (Van Heflin), un granjero casado y con dos hijos, que está casi en la
ruina por las malas cosechas, acepta por trabajo por el dinero que ofrecen y
que podrá arreglarle la vida.
Uno de
los mejores westerns de su director y de los años 50. Delmer Davis dirigió
otros, también interesantes, como “Flecha rota”, “Jubal” o “El árbol del
ahorcado”.
Parte
de un relato de corto de Elmore Leonard, escritor que ha aportado al cine películas
como “Joe Kidd”, o “Jackie Brown”, entre otras.
Los
dos actores principales (geniales interpretaciones) se enfrentan en un duelo
físico y también psicológico, del que Davis sabe sacarle mucho partido, aparte
de mostrar con cierto lirismo la inmensidad de los áridos paisajes del lejano
oeste.
En
2007 se estrenó un remake (a mi modo de ver inferior a esta) protagonizada por
Russell Crowe y Christian Bale, y dirigida por James Mangold.
Glenn Ford es un habitual de los westers en los años 50 y 60. Protagonizó, entre otras, El hombre de Colorado, El desertor de El Alamo, Jubal, Llega un pistolero, Cimarrón, Las pistolas del infierno, Furia en el valle, etc.
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