Director:
Julio Salvador
España,
año 1950; duración, 90 minutos.
Reparto:
Conrado San Martín, Tomás Blanco, Manuel de Juan, Elena Espejo, Modesto Cid,
Ricardo Fuentes, José Goula, Marta Grau, Emilio Fábregas.
Sinopsis:
Un
joven muere asesinado en plena calle, junto enfrente de la Jefatura de Policía
de Barcelona. Miguel y Marcial, los agentes de la Brigada Criminal encargados
del caso, encuentran en la habitación del muerto un ejemplar de “La
Vanguardia” con un anuncio subrayado en el que se ofrece un puesto de
gerente para una empresa de productos químicos, dando como dirección el de
apartado de correos 1001.
Con
esta única pista inician sus investigaciones que los llevan a dar con una chica
que actúa sin saberlo como correo de unos narcotraficantes.
Ambientada
en la ciudad de Barcelona y rodada en exteriores naturales, tuvo mucho éxito en
su momento.
Una de
las mejores obras del cine español que bebe de las fuentes del cine negro
estadounidense y el neorrealismo italiano. El resultado es una trama sólida y
convincente que con un ritmo y una tensión adecuadas mantiene al espectador en
vilo hasta el desenlace final.
Se
hace una loa a los servicios policiales del momento, supongo que para contentar
a la dictadura franquista y que la censura no se inmiscuyese demasiado.
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